La compañía Pepsi ha lanzado un spot publicitario en el que no encuentra otra mejor manera de promocionar su producto
que arremetiendo contra las bibliotecas.
Si los responsables de esa compañía, desde los creativos hasta los directivos encuentran justificación alguna para ello,
creo que deberán explicarlo a la sociedad entera.
Como presumo que no van a dar tales explicaciones he ido directamente a las fuentes. Este tipo de compañías suelen practicar una gran opacidad y sus directivos están tan blindados de la opinión pública como sus sueldos suelen estarlo de los vaivenes de la economía, pero en su página web se puede leer Nuestra visión: “Mejorar continuamente todos los aspectos del mundo en que desarrollamos nuestras operaciones (medioambiente, sociedad, economía) creando un futuro mejor que el presente… poner en marcha iniciativas que beneficien a la sociedad…”.
También leemos
Valores y filosofía:
- preocupación por nuestros clientes, consumidores y el mundo en que vivimos
- comunicación clara y sincera
- calibrar los efectos a corto y largo plazo
- beneficiarse de la diversidad y de la inclusión
- respetar a los demás
Ignoro en cual de estos epígrafes se puede sostener una nefasta campaña publicitaria basada en hostigar a una de las instituciones culturales fundamentales en la sociedad, célula básica, elemental e imprescindible del desarrollo social y cultural de cualquier comunidad.
Por demás es innecesario que una publicidad de un refresco tenga que denigrar a las bibliotecas y por extensión a los profesionales que se encargan de ellas.
Parece ser que a través de alguna red social han presentado algún tipo de torpe disculpa pero eso no es suficiente. Esa compañía de refresco, con fórmula parecida a la españolísima zarzaparrilla debería hacer algún tipo de descargo, por ejemplo costeando alguna acción de promoción a la lectura y de cooperación bibliotecaria con países en desarrollo, para lo cual ANABAD muy gustosa se ofrece a liderar.
Pepsi puede cambiar la historia haciendo que su marca quede indeleblemente marcada y vinculada al desarrollo y promoción de la lectura entre los más desfavorecidos.
José María Nogales Herrera
Vicepresidente de ANABAD