La brecha digital persiste incluso cuando las personas de bajos ingresos adquieren más herramientas tecnológicas
Anderson, Mónica. “Digital divide persists even as lower-income Americans make gains in tech adoption”. Pew Research, March 22, 2017
Casi 30 años después de la creación de la World Wide Web, el uso de Internet, la adopción de banda ancha y la propiedad de teléfonos inteligentes han crecido rápidamente entre todos los estadounidenses, incluidos entre aquellos menos pudientes económicamente. Pero aun cuando muchos aspectos de la brecha digital se han estrechado, la vida digital de los estadounidenses de bajos y altos ingresos sigue siendo notablemente diferente. Cuando se trata de la capacidad para utilizar la tecnología, los estadounidenses de bajos ingresos tienen más del doble de probabilidades que el resto de otros grupos de ingresos por hogar de ser clasificados como con pocas destrezas tecnológicas.
Aproximadamente tres de cada diez adultos con ingresos familiares por debajo de 30.000 dólares al año no poseen un teléfono inteligente. Casi la mitad no tiene un ordenador, ni servicios de banda ancha en casa. Y la mayoría de los estadounidenses de bajos ingresos no son dueños de tablets. En comparación, muchos de estos dispositivos son casi omnipresentes en los hogares que ganan 100.000 dólares o más al año. Así, dos tercios de los adultos que viven en hogares con altos ingresos tienen servicios de banda ancha en el hogar, teléfono inteligente, ordenador de escritorio o portátil y tablet, en comparación con el 17% de los que viven en hogares de bajos ingresos.
Las personas de más bajos ingresos solo disponen de Internet a través del móvil. En 2016, una quinta parte de los adultos que vivían en hogares en los que se ingresaba menos de 30.000 dólares al año eran usuarios de Internet únicamente desde sus teléfonos inteligentes, es decir, poseían un teléfono inteligente, pero no tenían internet de banda ancha en casa. Lo que conlleva a que utilicen los teléfonos inteligentes para tareas para las que habitualmente se utiliza una pantalla de mayor tamaño. tales como buscar empleo.
Unos 5 millones de niños estadounidenses en edad escolar no tienen conexión a Internet de banda ancha en casa, y los hogares de bajos ingresos representan una proporción muy superior en esta cuestión respecto a aquellos otros que tienen ingreso medios o altos.
El nivel de destrezas tecnológicas de una persona varia entre quienes tienen y usan Internet en el trabajo y en su vida cotidiana, aspecto que tiene que ver con el nivel de ingresos en el hogar. Así el 81% de los trabajadores en el que los ingresos familiares anuales está en torno a los 100.000 dólares o más, usan Internet para tareas relacionadas con el trabajo; esa proporción cae al 36% entre los trabajadores que viven en hogares de bajos ingreso