Óscar Alzaga (Madrid, 1942), uno de los políticos más destacados de la transición en la UCD, acaba de publicar ‘La conquista de la transición (1960-1978)’. Con subtítulo imprescindible: ‘Memorias documentadas’
Óscar Alzaga. (EFE)
ARTÍCULO: Por José Antonio Zarzalejos
Ya apartado de la actividad docente y del ejercicio de la abogacía ha culminado un libro de carácter histórico, inhabitual en su bibliografía: la reconstrucción de la “conquista” de la transición basándose en documentación en muchos casos inédita procedente de archivos inexplorados como el de Joaquín Satrústegui. El relato es pormenorizado, casi puntilloso. No deja cabos sueltos. Ha recibido presiones para que ni lo escriba y, ya escrito, evitase su publicación. Oídos sordos. Se muestra lúcido en nuestra conversación, tranquilo y consciente de que su obra editada por Marcial Pons —ha renunciado a los derechos de autor— molestará a muchos de sus seguros lectores y quebrará convenciones, más aún procediendo ese texto de un centrista democristiano. A la actual altura de su vida, en la que se encuentra como en una atalaya, esta crónica de la “conquista” de la democracia parece haber satisfecho en el autor un deseo vital largamente esperado.
PREGUNTA. En su libro ‘La conquista de la Transición’ hace una observación importante: sus protagonistas apenas han escrito sobre ella. ¿Por qué este vacío, este silencio?, ¿son los que le han animado a esta iniciativa editorial?
RESPUESTA. Entiendo bien que la inmensa mayoría de los líderes de la oposición democrática de los años sesenta del siglo pasado no se animasen a poner por escrito como desgastaron al régimen en la ilegalidad. A mí escribir este libro me ha llevado diez años, pues, además de acudir a los numerosos papeles que conservo en mi archivo, me ha parecido imprescindible encontrar en la prensa extranjera y en otras fuentes dispersas datos fiables en que apoyarme; de los que dejo constancia en notas a pie de página. Resulta una tarea dura para quienes somos mayores, pero me pareció obligada, pues nuestro pueblo tiene derecho a saber su verdadera historia y creía que podía aportarle una buena porción de su pasado reciente.
PREGUNTA. En su libro ‘La conquista de la Transición’ hace una observación importante: sus protagonistas apenas han escrito sobre ella. ¿Por qué este vacío, este silencio?, ¿son los que le han animado a esta iniciativa editorial?
RESPUESTA. Entiendo bien que la inmensa mayoría de los líderes de la oposición democrática de los años sesenta del siglo pasado no se animasen a poner por escrito como desgastaron al régimen en la ilegalidad. A mí escribir este libro me ha llevado diez años, pues, además de acudir a los numerosos papeles que conservo en mi archivo, me ha parecido imprescindible encontrar en la prensa extranjera y en otras fuentes dispersas datos fiables en que apoyarme; de los que dejo constancia en notas a pie de página. Resulta una tarea dura para quienes somos mayores, pero me pareció obligada, pues nuestro pueblo tiene derecho a saber su verdadera historia y creía que podía aportarle una buena porción de su pasado reciente.