José María Sanz Zaragoza (Arquitecto), Sergio Izquierdo Guillén (Arquitecto), José Francisco Casabona (Arqueólogo) y Javier Ibáñez González (Arqueólogo)

El proyecto contempla una serie de estudios y ensayos para la caracterización geotécnica del recinto y poder adoptar la mejor decisión en cuanto a su recalce ya que el macizo rocoso sobre el que se asienta está inmerso en un proceso de fraccionamiento y desplazamiento. Por otro lado se prevé el vaciado general y la excavación de los rellenos de escombros de primer y segundo recinto, tanto por los problemas de inestabilidad que generan como por el interés arqueológico que supone. Se sanearán y consolidarán los restos de muros que se desentierren y se realizarán las tareas necesarias para garantizar la estabilidad y evitar el estancamiento de agua y nieve. También se contempla, entre otros trabajos, el saneamiento de los muros existentes, la reposición volumétrica donde haya pérdidas importantes de volumen, el rellenado de grietas y fisuras, se derruirá la cubierta ruinosa de madera de la torre del primer recinto, se supervisará el interior de las bodegas colindantes para comprobar su estado y la existencia de posibles desprendimientos, realizándose apuntalamientos si fuese necesario y se acondicionará el acceso a las plataformas superiores del castillo. Las actuaciones afectan a las plataformas de titularidad estatal que se corresponden con los restos del castillo. No se intervendrá en la zona más baja de Mont Regal, donde se sitúa la Iglesia, por ser de otra titularidad.