De temática muy variada que ha oscilado entre la representación real de situaciones y sensaciones a una visión más abstracta de lo que supone esta pandemia para todos nosotros. A la soledad de las calles vacías, los establecimientos cerrados o la reclusión en las viviendas se han ido agregando imágenes de la progresiva desescalada: las primeras salidas infantiles, el reencuentro familiar, la reapertura comercial…
Entre las aportaciones a esta memoria colectiva en imágenes destaca la realizada por La revista de Valdemoro que ha incrementado este proyecto con más de setenta trabajos gráficos; también las contribuciones de FCC que ha testimoniado gráficamente las labores de desinfección llevadas a cabo en todo el municipio; o de la Policía Local y Protección Civil, garantes del cumplimiento de las nuevas normas y del suministro de mascarillas a la población en los primeros momentos de desconfinamiento. Además del fondo institucional que será muestra para la población actual y las generaciones venideras de esta nueva realidad desconocida hasta ahora: el luto oficial más prolongado de la democracia o la celebración de los plenos de una manera “híbrida”, con buena parte de los ediles interviniendo telemáticamente por motivos de seguridad…
Por último, también se ha incorporado a este fondo el medio centenar de obras presentadas en el concurso fotográfico bajo el lema “De esta salimos” organizado por la Concejalía de Cultura en colaboración con Zoom Helicón y Ncuadres. El siguiente paso va a ser tratar adecuadamente este legado para crear un archivo virtual de la memoria y garantizar la perfecta conservación y acceso futuro a esta colección. Todas y cada una de las imágenes recibidas son un testimonio por sí mismo que servirá en el futuro para recordar e interpretar este periodo.
El pasado abril el Archivo Municipal de Valdemoro lanzó la iniciativa “Valdemoro desde el confinamiento”, con el propósito de solicitar a la ciudadanía imágenes realizadas desde las calles y espacios públicos de la ciudad, desde su ventana, balcón o terraza; así como situaciones cotidianas que recogieran momentos domésticos, laborales, incidencias… para colaborar de este modo en la documentación del estado de alarma y confinamiento en los hogares por la pandemia del COVID-19.
El Archivo Municipal de Málaga fue uno de los pioneros en plantear esta actividad a la que se sumaron otros. En la Comunidad de Madrid además de Valdemoro, los archivos de los municipios de Leganés, Moralzarzal, Arganda del Rey, Rivas o Manzanares el Real, secundaron la creación de un banco de imágenes para que las generaciones futuras conocieran cómo han vivido sus vecinos este dramático episodio de nuestra historia reciente.